La Casa de la Capitulación única edificación colonial en Maracaibo que se renueva con la IA
La Casa de la Capitulación es la única edificación de época colonial que queda en Maracaibo, esta tiene más de 274 años y su arquitectura aún se conserva como si tuviera un año.
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En este lugar, Francisco Tomás Morales estuvo alojado y en ella firmó el Tratado de Capitulación, del 3 de agosto de 1823, tras la Batalla Naval del Lago de Maracaibo, hechos a los que se debe su nombre: Casa de la Capitulación o de Morales, según datos recopilados en el Acervo Histórico del estado Zulia.
El lugar se ha convertido en un punto de atracción entre los marabinos que usualmente lo visitan, para poder apreciar sus objetos antiguos que cuentan, cada uno, una historia de los acontecimientos vividos hace décadas atrás.
“Es un patrimonio histórico que aún conservamos en la ciudad y es importante, porque se firmó el Acta de la Capitulación allí”, expresó Estefany Bracho, marabina que caminaba por su acera.
Ante tantos hechos, la Casa de la Capitulación o de Morales fue declarada Monumento Histórico Nacional el 26 de agosto de 1965 y está adscrita a la Dirección de Acervo Histórico del estado Zulia, siendo la única edificación colonial existente en la ciudad de Maracaibo.
La IA llega a la Casa de la Capitulación
A pesar de ser una edificación colonial, entre sus objetos, se ha instalado la Inteligencia Artificial, que cuentan una gran historia de los hechos ocurridos décadas atrás.
¿Cómo está implementada la IA en la Casa de la Capitulación?
La Casa de la Capitulación cuenta con bustos y cuadros de los diferentes próceres que estuvieron presentes en la Batalla Naval del Lago. En su base incluyeron un código QR que te lleva a la presentación del prócer mediante un video, quien se presenta y da una pequeña semblanza de lo que hizo en su época.
¿Qué se puede encontrar en la Casa de la Capitulación?
En esta instalación existe un salón llamado 28 de Enero, en honor al Día de la Zulianidad, además un salón donde reposa algunos trajes que se usaban en la época.
En el patio hay un pozo que es donde se recolectaba el agua cuando llovía y, a su vez, era trasladada a una piedra que funcionaba como purificador.
La Casa de la Capitulación ha sido remodelada varias veces, pero siempre ha conservado su esencia y magia de ser de la época colonial, aspecto que la hace atractiva para el público marabino.
Por María Briceño
