Erika de la Vega cuenta como vivió su proceso de operación
El pasado mes de noviembre de 2023, la animadora sorprendió a sus seguidores al anunciar que se había sometido a una cirugía craneal para extraer el tumor, que resultó ser benigno.
“Yo lo viví de una manera muy ejecutiva. La mayoría de estos tumores son benignos y hay que sacarlos. Hay diferentes opciones para tratarlos. La única opción que el doctor me dio fue sacarlo”, dijo la venezolana en entrevista con Chabán Podcast, de Alejandro Chabán.
Así lo vivió
La también locutora relató cuando el médico le explicó el procedimiento que le practicarían. «Vamos a abrir, taladramos y sacamos» recordó al tiempo que señaló que se sintió cerca de la muerte. “Obviamente, soy una persona optimista, el doctor fue claro conmigo y me habló de los riesgos de la operación y lo que no pasa. Me quise poner al lado de las cosas que no pasan”, dijo.
“Me puse muy fría, muy firme… No sabía la magnitud hasta que llegué ahí. Necesitaba que todo lo que estuviera a mi lado fuese tan fuerte como yo, aunque por dentro estábamos todos temblando. Yo necesitaba estar fuerte, firme”, recordó.
En ese entonces, Erika de la Vega decidió contar lo que estaba pasando a pocas personas. “No podía escuchar a alguien desde su debilidad, vulnerabilidad o espejo, sino más bien quedarme sellada y vivir esto conmigo y afrontarlo”, detalló.
En cuanto a su hijo, Matias, De la Vega recordó que a él también le tocó ser fuerte. “Se puso emocionalmente muy duro. Tanto así que un día antes de irme al hospital le dije que me iba y él: ‘ok, chao’; y yo le dije que aquí no, aquí sí me tienes que dar un abrazo”, dijo entre risas.
Inventario de ideas
Durante la entrevista, Erika de la Vega comentó que una vez que estuvo más calmada tras el diagnóstico decidió aprovechar todo lo aprendido emocionalmente para enfrentar la situación.
“Lo primero que hice fue agarrar todas estas herramientas que he aprendido a lo largo de estos años, porque estoy segura de que me prepararon para este momento. Por eso te digo que nada pasa por casualidad”, apuntó.
La caraqueña recordó que el diagnóstico del tumor se dio casi por casualidad. “Yo fui buscando un chequeo anual. Me había roto el ligamento en marzo esquiando. Al evaluarme mandan a hacerme una resonancia en la rodilla y yo le dije para que me mandara a hacer una en la cabeza porque a mi mamá se le rompió un aneurisma hace 4 años. Yo tenía pendiente de hacerme ese chequeo”, contó.
Y agregó: “Ese examen, para saber que todo estaba bien, arrojó que había una mancha (y llevó a) que me hiciera otro con contraste. Así fueron pasando las semanas, meses; se descartó el aneurisma, pero salió una masa”.
Hallazgo
Después de lo vivido, De al Vega deja claro que ahora aprovechará su tiempo al máximo. “¿Esta segunda oportunidad, cómo la voy a vivir? Quiero descubrir qué he dejado de hacer por andar en la corredera del día a día. Dejar y sacar maneras de pensar, procesos, manera de gestionar las emociones”, expresó.
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