La Albiceleste tuvo buenos pasajes en ataque durante el encuentro que se disputó en Lyon, pero en defensa se mostró poco sólido permitiendo que su rival llegara en varias oportunidades.
A pesar de esa poca solidez, las intervenciones a último momento de los defensores y los disparos que sacó Gerónimo Rulli, fueron fundamentales para quedarse con la victoria.
En la primera parte donde ambos tuvieron chances, fallaron mucho en el último tercio de la cancha por virtudes de los rivales y por la poca eficacia propia por lo que se fueron empatados en cero al entretiempo.
Previo a que los equipos salieran para disputar el segundo tiempo, se escuchó a Nicolás Otamendi decirle a Thiago Almada: ‘hacete cargo», y vaya que lo hizo.
Solo corrían dos minutos de iniciado el complemento, cuando el 10 sacó un tremendo remate de derecha desde afuera del área para colgar la pelota en el ángulo izquierdo para el 1-0.
A partir de ese momento, la Albiceleste bajó el pie del acelerador y dejó crecer a Ucrania. Esto, sumado a la salida de Luciano Gondou y el ingreso de Santiago Hezze, dejó claro lo que pretendía hacer Mascherano.
Frente a la presión del conjunto europeo, Argentina buscó salir de contragolpe lazando a Giuliano Simeone en cada oportunidad que tuvo, pero nunca tuvo una clara de frente al arco.
Los últimos 10 minutos, la Albiceleste siguió replegándose en defensa y cuando se jugaba un minuto de adición, el Diablito Echeverri estableció el 2-0 definitivo.
Aunque sumó de a tres, la goleada de Marruecos sobre Irak por 3-0 dejó a Argentina en la segunda colocación de su grupo.
Su encuentro en los cuartos de final será el viernes a las 16:00 en Burdeos, probablemente frente a Francia, ya que tiene mucha diferencia de gol sobre Estados Unidos.
Con info de ESPN