Venezuela: Descubren nueva especie de rana en una remota montaña

Durante una expedición a una remota montaña venezolana, un equipo de investigadores hizo un hallazgo sorprendente: una criatura con características únicas. Su vientre transparente y sus ojos oscuros la hacían destacar, pero al mismo tiempo, su apariencia enigmática había dificultado su identificación en el pasado.

Sin embargo, tras analizarla con mas detenimiento, los científicos concluyeron que se trataba de una nueva especie.

En el 2011, uno de los expertos, Philippe Kok subió a una intrincada montaña, conocida como Angasima-tepui, para investigar la vida silvestre de la región, escribió el científico en un estudio publicado el 1ro. de agosto en la revista especializada Zoological Letters. Kok estaba buscando una especie de rana que, según investigaciones previas, se creía que estaba propagada en varias montañas. Pero Kok no estaba del todo convencido. Estas montañas están separadas por ríos y por lo general, dificultan el acceso, de modo que Kok tenía dudas sobre cómo una pequeña especie de rana podía ser capaz de poblar varios picos. Lo que realmente Kok sospechaba era que esta especie era en realidad varias especies “crípticas” juntas y decidió investigar.

Durante sus expediciones, Kok encontró nueve de estas pequeñas ranas de color marrón, dijo el estudio. Tras observar con una mayor profundidad a las ranas, no tardo mucho en concluir que había descubierto una nueva especie de rana: stefania imawari. Las ranas stefania imawari se consideran “pequeñas”, toda vez que solo tienen poco más de dos pulgadas de tamaño, agregó el estudio. Tienen hocicos “redondos”, lenguas “largas” y bocas “acampanadas”. Sus “ojos de un color marrón oscuro” tienen “amplias” marcas y, en algunas, un “ligero tinte azul grisáceo”.

En una foto se puede apreciar a la nueva especie. En general, tiene un color marrón claro y una piel grumosa. Vista desde abajo, su vientre es “ligeramente translúcido” y “algunos órganos internos son visibles”. Las ranas stefania imawari varían en color, y van desde un “marrón casi dorado hasta un marrón castaño, y un marrón entre oscuro y verdoso”, señaló el estudio. En las fotos se puede apreciar esta variación. La nueva especie se halló en rocas, plantas o en la tierra en horas de la noche, o “escondida bajo las rocas durante el día”, dijo Kok. Su hábitat es “una mezcla de rocas y áreas verdes” y elevaciones de unos 7,000 pies.

Las ranas stefania imawari tienen una “conducta única de cría que, entre otras cosas, consiste en que las hembras carguen los huevos en el lomo”, observó el estudio. Kok no vio ninguna rana stefania imawari con huevos, aunque sí vio una hembra con una “mancha pegajosa” en el lomo, posiblemente debido a restos de huevos. Kok dijo que bautizó a la nueva especie “imawari” por los “espíritus malignos que viven en la montaña tepuis”, según las arraigadas creencias de los indígenas pemón que viven en el área.

Hasta ahora, las ranas stefania imawari solo se han encontrado en Angasima-tepui, dijo el estudio. Esta montaña está al este de Venezuela y cerca de la frontera con Brasil y Guyana. La nueva especie se pudo identificar por el color de los ojos, la textura de la piel, el esqueleto, la forma del cuerpo y el ADN, dijo el estudio. Kok también descubrió una segunda nueva especie de rana, stefania upuigmae, en una montaña cercana.

El descubrimiento de esta nueva especie destaca la importancia de la investigación científica en áreas remotas y poco exploradas. Además, resalta la diversidad biológica de Venezuela y la necesidad de proteger estos ecosistemas únicos.

Información de El Nuevo Herald

 

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