Real Madrid recibió el trofeo de su trigésimo sexta Liga, ocho días después de proclamarse campeón con cuatro jornadas aún por disputarse, de manos del presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Pedro Rocha, en un acto privado en el estadio Alfredo Di Stéfano que dio paso a las celebraciones que continuan en Las Cibeles y en las calles de la capital de España. De fondo, jugadores e hinchas ya piensan también en la final de la Champions, ante Borussia Dortmund, el sábado 1° de junio en Wembley.
Los jugadores del Real Madrid y el cuerpo técnico encabezado por Carlo Ancelotti celebran con su afición en la fuente de Cibeles la conquista de LaLiga EA Sports. Antes iniciarán un recorrido por Madrid tras visitar la sedes de la Comunidad de Madrid, donde espera un autobús descapotable que les trasladará al Ayuntamiento.
A las 10:00 horas, en la ciudad deportiva de Valdebebas, se inició la mañana de celebraciones, con la entrega de la copa de campeones de Liga. Lo hizo Pedro Rocha acompañado del presidente del Real Madrid, Florentino Pérez. En un pasamano con todos los técnicos y posteriormente jugadores madridistas hasta llegar al capitán, Nacho Fernández, a quien entregó el trofeo.
Nacho se dirigió hacia donde esperaban el resto de jugadores para realizar una foto, con un gran cartel de «campeones» y posaron entre aplausos. Se sumaron posteriormente Florentino Pérez y el presidente de honor José Martínez ‘Pirri’ junto al presidente de la RFEF.
Ya con el trofeo de campeones de Liga en sus manos, la plantilla madridista se subió al autobús oficial del equipo para dirigirse a la sede de la Comunidad de Madrid.
Real Madrid celebró el 36º título de Liga en la sede de la Comunidad de Madrid en un acto en el que la próxima final de la Champions del 1 de junio estuvo presente en las palabras de la expedición madridista y de la presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso. Luego, ante los hinchas, las figuras de Real Madrid hicieron una promesa de cara a la final de la Champions.
“Para nosotros es una alegría tremenda el poder estar aquí con todos vosotros. Esto significa que las cosas han ido bien durante el año. Es un día muy especial para mí porque he venido muchas veces, pero ahora lo hago como primer capitán y es un orgullo tremendo”, dijo Nacho, el primero en hablar.
El siguiente en tomar la palabra fue Florentino Pérez, pquien resaltó la fortaleza de la plantilla para superar las lesiones sufridas durante la temporada, y ya enfocó la final de la Champions del 1 de junio en Wembley, en la que aseguró que «se van a dejar el alma por la decimoquinta».
«Es una Liga de constancia y sacrificio, un nuevo impulso para el siguiente desafío porque la historia nos obliga a seguir ganando. El equipo acaba de protagonizar otra noche mágica en el Santiago Bernabéu que agiganta el orgullo de los madridistas y que nos lleva a la final de Londres, el 1 de junio. Que nadie tenga duda de que los jugadores se van a dejar el alma para volver a esta casa con la decimoquinta Copa de Europa», aseguró en su discurso en la Real Casa de Correos.
Además, resaltó el valor de la 36ª Liga. «Aquí está la Liga 36 de la historia del club, una Liga muy especial porque ha sido conquistada con los valores de nuestro escudo para millones de madridistas en todos los rincones del mundo. El club tiene ya 122 años de vida y todo lo logra con esfuerzo, sacrificio, valores, superación permanente, solidaridad y juego limpio. Por eso somos el club más querido del mundo», dijo.
«Es muy difícil superar las adversidades que se han superado esta temporada. Lo peor del fútbol son las lesiones y este grupo ha tenido la fortaleza de levantarse a lesiones muy graves. Courtois, Militao y Alaba son ejemplos de superación. La plantilla se ha rebelado ante estas circunstancias y ha dado la vuelta a una situación que parecía irreversible», prosiguió.
Tras los discursos el presidente de Real Madrid, jugadores y cuerpo técnico estamparon su firma en el libro de la Comunidad de Madrid antes y salieron al balcón a dirigirse a la afición. Con palabras de agradecimiento y cánticos, lo más destacado fueron los gritos de los aficionados que pidieron a Modric y Nacho que se queden en el conjunto blanco, además de pedir el Balón de Oro para Vinícius Junior.
Además, Rüdiger provocó las risas de aficionados y compañeros al coger el micrófono. “El loco está aquí. Buenos días a todos. Muchas gracias por venir. A disfrutar de este día y a por la 15ª”, dijo. Tras poner fin a la celebración en la Comunidad de Madrid, el Real Madrid se dirigió al Ayuntamiento como última parada antes de dirigirse a Cibeles en un autobús descapotable.