Gobernación entregó sillas de ruedas, bombas y tanques de agua a comunidades marabinas
El Gobernador del Zulia, Manuel Rosales Guerrero, entregó este viernes, 15 de diciembre más de 200 tanques, sillas de ruedas, bastones y otros beneficios a través de la Secretaria de Desarrollo Social de la Gobernación, en acto realizado en la Cancha «Elio González», diagonal a Makro en Maracaibo
A su llegada, Rosales pidió un aplauso para Maracaibo y deseó una feliz Navidad, para todos y en especial, a quienes están fuera de Venezuela. «Tuvieron que irse, a buscar oportunidades, trabajos, estudios, pero esa es nuestra lucha, también por ellos. Desde aquí les digo que ustedes están allá, pero nosotros estamos cuidando a su familia que está en el Zulia».
En medio de todo esto, manifestó que sigue trabajando:
«Ahorita hay un Mercado Popular en San Jacinto con precios accesibles para toda la población. Yo dije hace unos días que la gente podía comprar las cantidades que quisiera, pero algunos compraban cinco o seis perniles, diez paquetes de harina y salían a revenderlo. Por eso, hemos tenido que poner orden. Hay vivos que nos han llevado a esto».
Manuel Rosales Guerrero, gobernador del Zulia.
También manifestó que esta práctica se observa con la entrega de cartas que recibe de parte de la gente, para cualquier solicitud.
Reiteró que este país, pudiera ser el mejor del mundo, «dicen estudios internacionales que posee las mayores reservas de petróleo, gas, oro, coltan y bauxita, pero ¿De qué nos sirve? ¿Cuánto gana la gente? Una miseria. ¿Cuánto gana un pensionado que trabajó 25 ó 30 años y hoy recibe una migaja? Una burusa, como digo yo, y todo por un pleito político que empezó hace 23 años y no se sabe porqué».
Sostuvo que «tenemos una sola posibilidad para salir de esta pesadilla: el voto. La abstención no sirve, por eso hay que inscribirse en el Registro Electoral Permanente; revisar la dirección de dónde uno vota, porque esa es el arma secreta, poderosa para decir: este sirve, lo dejamos; este no sirve, lo sacamos. Y el año que viene, vamos a colocar en la evaluación a los que van a competir para la Presidencia de la República. Estoy seguro que Maduro está raspado, porque no le ha cumplido a la gente».
También destacó que dentro de dos años se realizarán las elecciones de Gobernadores. «Ustedes dirán: ¿Sigue Manuel o se va Manuel? Ustedes saben que lo que yo hago es puro amor a esta tierra. Algunos se han dedicado a criticarme, a destruirme, dicen ellos, porque fui a los actos por el Bicentenario de la Batalla Naval del Lago. Ahí estaba mi silla: Gobernador del Zulia. ¿Qué querían, que la dejara vacía porque estaba Maduro?
Apuntó que fue a ese acto en la Vereda del Lago «y voy dónde sea, enfrento a Maduro y le digo: dele al Zulia lo que corresponde, lo que es nuestro. Otra cosa es que yo declare la guerra al Gobierno Nacional. Ellos son los que están allí. Cuando hablo del tema eléctrico, del agua o de los colectores, ¿con quién voy a hacerlo? Tengo que hablar con ellos ó ¿con quién más voy a hablar? O nos declaramos en guerra, ¿para que no se solucione nada?».
Afirmó que ese no es el tema y dijo que «algunos andan por ahí, como no tienen qué criticarme, porque yo trabajo en la madrugada, en el día, a mediodía, por la noche, a cualquier hora, por esta tierra que tanto quiero; cómo no tienen nada que decir, inventan cuentos, fábulas, pero la gente me conoce».
Recordó que en su primera gestión como Gobernador, «el difunto, que en paz descanse, ganaba en todas partes de Venezuela. Él venía para acá y le decían de todo de mí y les pedía, rogaba: saquen a Manuel Rosales de la Gobernación y resulta que jamás pudo ganar una elección en el Zulia. Ustedes saben toda la cacería que me montaron y estuve seis años en el exilio, por allá botado, sólo. Y allá me enteré que se había perdido el Zulia».
Resaltó que regresó al país, luego que un miembro del Tribunal Supremo de Justicia declaró en Estados Unidos que a él le había dado la orden, para elaborar ese expediente en mi contra, por parte de Luisa Ortega Díaz. Y el que había hecho la denuncia introdujo una carta a la Contraloría, «en la cual afirmó que a él le habían dado pruebas falsas, para acusarme, hasta de unos carros viejos, una chatarra que regalé. Me acusaron de todo. Regresé y estuve un año preso en el Helicoide, pero lo asumí con hidalguía».
Rosales señaló: «Vine al Zulia, escogimos un candidato, ganó y murió la flor. Entonces dije: voy a dejar sentadas las bases, porque voy a demostrar que no estoy de acuerdo con él. Me postulé y fueron todos contra mí y ganó el destructor. Bueno, yo aguanté mi pela. El destructor casi acaba con todo y yo afirmé: no se lo voy a permitir. Por eso estoy hoy aquí: defendiendo la bandera, los colores del Zulia».
Reseñó que algunos inventan que Manuel está con el Gobierno, está con Maduro. «Jamás en mi vida. No creo en ese modelo socialista-comunista. No creo, porque eso es beneficio para un grupito y que los demás pasen hambre. Creo en la propiedad privada. Creo en la libertad. Creo en la felicidad. Creo en el desarrollo de la familia, que tiene que salir de abajo. En ellos no, porque han sumido en el hambre a Venezuela. Han llevado a la destrucción a este país».