Basílica de Maracaibo avanza en la restauración de las pinturas que embellecen el templo

Los frescos y murales que embellecen la Basílica de Maracaibo avanzan en su proceso de renovación y restauración, en un arduo trabajo que es realizado por mano calificada de artistas zulianos.

En rueda de prensa desde del salón parroquial de la Basílica, el presbítero Nedward Andrade, párroco de este templo, resaltó este lunes que todavía se desconoce cuando serán entregados los trabajos de restauración de estas pinturas creadas por el italiano Pablo Castellani.

«No hay una fecha que podamos dar porque es un trabajo de restauración, entonces la restauración no sabemos cómo puede ir progresando en cuanto a que es la intervención directa de una pieza que debe llevarse a su estado originario», amplió.

El presbítero indicó que hay partes donde el trabajo puede realizarse de manera más rápida, y otras donde es más lento debido a la profundidad que necesite. Manifestó que el área de San Juan de Dios ya fue completamente renovada, y eso llevó un total de tres meses.

Andrade señaló que todavía falta la Nave Central, la Nave del Santísimo, el pórtico e incluso se debe revisar nuevamente el presbiterio «porque es un tema. Primero antes de llegar a esa etapa de restauración, debimos nuevamente impermeabilizar la Basílica».

«Las cúpulas, acumulación de sucio, se tuvo que hacer un trabajo de impermeabilización bastante serio porque las filtraciones dañan. También el tema de los aires acondicionados que se ha controlado, entonces no hay un tiempo definido pero esperamos en Dios y en la Virgen que tengamos avances significativos», agregó.

El sacerdote comentó que espera que para la Aurora de la Virgen, que se llevará desde la noche del sábado 30 de noviembre, ya esté «casi lista«: «ahí los artistas dirán: padre, podemos ir lento pero seguro».

Además, el padre Nedward Andrade informó que esta renovación la «está realizando la Presidencia de la República a través del Ministerio de Obras (…) Ya se había hecho una primera etapa hace dos años del Presbiterio y ahora se está cometiendo toda, toda la Basílica en cuanto a sus frescos y columnas».

«La renovación y restauración no es un repintar, sino es llevar a un original y restaurar esa obra de arte. Como ven incluso los artistas ya especializados han llevado los colores originales que posee nuestra Basílica desde antaño, y están quedando verdaderamente hermosísimos», concretó.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

            Con información de Versión Final

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