Gobernador Rosales: “Todos los sectores debemos involucrarnos en el objetivo histórico de salvar el Lago”
495 años de fundada cumple Maracaibo, en medio de múltiples desafíos cuyas soluciones, a un lustro de cumplir su primer milenio, marcarán su devenir en las próximas décadas. A esto se refirió el gobernador del estado Zulia, Manuel Rosales Guerrero, en su discurso por el aniversario de la capital zuliana.
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El encuentro reunió a los representantes de los diferentes organismos públicos del estado, y fue propicio para hablar de los albores de la historia regional:
“Reflexionar sobre el origen de las ciudades en el mundo, es como descifrar un enigma que nos lleva a comprender la compleja red de relaciones que han marcado su trayectoria”.
Asentarse alrededor de los cuerpos de agua, recordó Rosales, configuró un carácter definido a los pobladores y una identidad que se ha mantenido y fortalecido con los siglos. “Hasta hace muy poco, cuando se globalizaron las tecnologías de construcción y los estilos arquitectónicos, los sistemas urbanos de todo el mundo parecían una familia de primos, con facciones comunes y reconocibles, pero también con características individuales, predominando la preservación de sus reservas de agua”, dijo.
Maracaibo nace y crece
El Gobernador recordó que corría el año 1529, un 8 de septiembre, cuando Ambrosio Alfinger, un alemán nacido a orillas del Danubio, venía navegando desde Santo Domingo y decidió desembarcar en una playa bordeada de palmeras, en los linderos que había dibujado años atrás Juan de la Cosa en lo que aparecía como tierra firme, a la entrada del Lago Coquivacoa. Allí decidió levantar una pequeña fundación al lado de una ranchería, frente a los palafitos de los indígenas, e hizo edificar varias casas para proteger a las mujeres y a los hombres que acompañaban su expedición: “¡así nació nuestra ciudad!”, expresó.
Desde esos tiempos inmemoriales, agregó Rosales, Maracaibo ha sido un faro de esperanza y progreso en esta tierra bendecida por el sol y bañada por las aguas del Lago: “nuestros antepasados construyeron esta ciudad con esfuerzo y sacrificio, forjando un espíritu de unidad y solidaridad que nos ha permitido superar todas las adversidades”.
Rosales apuntó que en este día en que se celebra la fundación de la ciudad, “nos encontramos en un momento crucial de nuestra historia… Nos aproximamos a los 500 años de la ciudad, lo que nos indica que estamos ante tareas pendientes imposibles de esconder”, agregó. “Si miramos al Lago de Maracaibo, por donde comenzó esta historia, seguramente diríamos que es la asignatura peor evaluada del último siglo. Es, a nuestro modo de ver, el gran desafío para los próximos 60 meses”.
El Mandatario sostuvo en que este aniversario era propicio para insistir en que todos los sectores se involucren de verdad en el objetivo histórico de salvar al Lago: “no sigamos buscando culpables, porque ahí está la historia… No sigamos gastando tiempo en operativos cosméticos que no van al fondo… El Zulia que ha dado tanto a Venezuela merece que de una vez por todas le construyan plantas de tratamiento con tecnologías de punta” agregó.
Escribir el futuro
El Gobernador del Zulia destacó que todos los sectores deben ponerse al frente de la mayor movilización de la historia por la salvación del Lago.
«Quiero que ese sea el mayor regalo para el 2029, dentro de 60 meses, cuando se cumplan los 500 años de la ciudad, sin miserias políticas ni cálculos egoístas”.
Rosales puso la mirada en el firmamento de las próximas generaciones: “considero urgente declarar al Lago de Maracaibo como un asunto de salud pública. Que se ponga por encima de los celos o de los fanatismos políticos y que convoque a las mentes más lúcidas del mundo para que nos ayuden con la responsabilidad del caso” indicó.
El Gobernador cerró su intervención recordando el tesón y carácter luchador heredado de los primeros pobladores en las riberas del Lago: “a pesar de los nubarrones, Maracaibo saldrá adelante como el pueblo aguerrido que es”, dijo. “Y el mejor regalo que podemos darle en este día a la ciudad, más allá de las palabras, es el amor. Besar al Lago como expresión de cariño para Maracaibo”.
