La educación y regularización infantil en la frontera: el gran desafío del gobierno regional
En sus artículos 7 y 8, la Convención sobre los Derechos del Niño de la UNICEF establece que éstos tienen derecho a una identidad, lo que incluye un nombre, una nacionalidad y poder determinar sus relaciones familiares. Es un derecho inalienable, por lo que su vulneración obliga a los Estados a solucionar esta situación cuanto antes. Esto no siempre se aborda eficientemente, y la irregularidad puede extenderse, en algunos casos, hasta la edad adulta.
Pero, en la frontera venezolana aún queda trabajo por hacer al respecto, y una de las pruebas está en los altos índices de escolares que no poseen documentación que los identifique legalmente como connacionales. En un esfuerzo mancomunado con otros organismos públicos y ONGs, la Gobernación del Zulia organizó y participó en un evento llamado «La identidad como derecho fundamental de niños, niñas y adolescentes en el contexto fronterizo». En este encuentro se habló de la mejor manera de visibilizar y atender a los llamados «ciudadanos pendulares»: aquellos que viven en las zonas limítrofes nacionales, son invisibles a los servicios de salud y de educación, no pueden acceder a fuentes dignas de trabajo y, por su condición de indocumentados, no suelen ser atendidos ni orientados hacia su regularización.
Poniendo orden
Consciente de la importancia de aliviar esta situación, el equipo de la Gobernación del Zulia, encabezado por el presidente de la Fundación Zuliana de Estudios Fronterizos (Funzef), Yohandri Sánchez, explicó que la intención del encuentro fue el de brindar herramientas a funcionarios de la administración pública de los tres niveles de gobierno que atienden casos a diario de esta índole. «Ocho de cada diez casos que llegan a las intendencias están relacionadas con la identidad» comenta. «Se estima que la mitad de los escolares en las zonas fronterizas no tienen documentación alguna», un problema persistente.
De acuerdo con la directora general de la Fundación Casa Bonita, Sol Rincón, se hace necesaria la mancomunidad y el trabajo conjunto de los tres niveles de gobierno en la atención de este problema. Los datos indican que en el Zulia, los municipios donde hay mayor incidencia son Mara y Guajira, a lo que se suman varias parroquias de Maracaibo.
El evento sirvió para poner el acento en la necesidad de impulsar más encuentros de este tipo, concretamente en las zonas de mayor vulnerabilidad. Una propuesta que contó con el apoyo y compromiso de los asistentes para definir nuevos escenarios de discusión en la materia.